10 de junio de 2014

TEATRO | "Cumbres Borrascosas" de Lolo y Lauti | Eléctrica pasión


"Este mundo [el burgués] se caracteriza por la intervención, entre el hombre y esta sociedad, de mediadores cada vez más invasivos que transforman la naturaleza misma de sus vínculos. Las relaciones del individuo con el medio social pasan en adelante, y fundamentalmente, por los objetos y productos transformados en las expresiones más tangibles de la presencia de la sociedad en su entorno, a partir del momento en el que toman el lugar de las 'cosas naturales'". Abraham Moles, ¿Qué es el kitsch?

Por Eugenia Guevara

Cumbres Borrascosas de Emily Brontë es la historia de un huérfano, Heathcliff, quien luego de amar y ser humillado, herido de resentimiento, toma venganza, aunque eso implica también su destrucción y la de Catherine. Todos más o menos conocemos esa novela de pasión, dolor, infelicidad y odio, donde la diferencia de clase - o la cuestión del origen se vuelve una marca irremediable que provoca abismos. De esa diferencia "de clase" parte la versión de Cumbres borrascosas de Lolo y Lauti, con texto de Gael Policano Rossi, que traspone el clásico "mediante una instalación compuesta por electrodomésticos, luces y audio". Lo que marca el abismo "de clase" entre Heathcliff y los Earnshow en este otro nuevo mundo de electrodomésticos es su condición de producto de industria nacional y no importado como sus padrinos, o incluso, importados de línea blanca como son los Linton.  

Así, el dramón de Brontë cobra vida por dos canales que se entrelazan en escena frente a los espectadores: podríamos llamarlos el eléctrico y el sonoro, aunque el sonoro también es eléctrico y el eléctrico a veces suena. Por un lado entonces el canal eléctrico, los electrodomésticos encendiéndose, cumpliendo su función, activándose y siendo iluminados para el momento de protagonismo que les toca, luego apagándose por un rato o para siempre. Por el otro, el canal sonoro, las voces de los actores que podemos reconocer fácilmente (la voz de Mirta Busnelli, la de Alejandro Tantanian, la de Martín Piroyanski, la de María Alché y la de Valeria Lois, entre otras) y los maravillosos y poderosos efectos de sonido. Resulta muy gracioso el recurso de la repetición, como en el caso de las secuencias que podríamos resumir "explosión de ira- ofensa - pasos - portazo - galope de caballo". También es extremadamente expresivo el sonido del viento entre las rocas, que de inmediato nos lleva a las cumbres borrascosas de aquel lugar tan inhóspito. 

La obra atrapa así: con aspiradoras, voces, licuadoras, heladeras, luces, televisores viejos, sonidos, electricidad. Está pensada/ planteada de manera inteligente, impertinente, innovadora y resulta muy elogiable la capacidad que tiene de crear climas de tensión, de distensión, y de emoción, a partir de dotar de un alma a los objetos inanimados, como si se tratara de alquimia. 

Teatro, arte y nuevos medios se asocian en esta joya de media hora. Para verla, habría que olvidarse de todo, aunque no se podrá dejar de pensar en todo. Por ejemplo: ¿Qué es el teatro sin el cuerpo del actor? ¿Es teatro? O, ¿al final a quién vamos a aplaudir? Y efectivamente, al final, el público aplaude a los electrodomésticos y se confunde, se detiene, hasta siente un poco de vergüenza, y se ríe, como se ha reído durante toda la obra. Alguien pregunta: ¿a quién aplaudimos? Y, aplaudimos a Lolo y Lauti y a Gael Policano Rossi, al Rojas que presenta esta arriesgada propuesta, y a los actores claro, a aquellos famosos que pusieron la voz y a estos ignotos que debutaron poniendo el cuerpo

"Cumbres borrascosas" de Lolo y Lauti a partir de la novela de Emily Brontë. Texto: Gael Policano Rossi. Curadora de proyecto: Maruja Bustamante. Audio: Santiago Martínez. Con las voces de: Martín Piroyansky, María Alché, Valeria Lois, Alejandro Tantanian, Julián Kartun, Ana Pauls y Mirta Busnelli. Producción: Belén Charpentier. Asistencia de producción: María José Schroeder. Robótica: Sergio Fasani. Diseño de luces: Violeta Mansilla. Asistencia de dirección: Tomás Fage y Violeta Mansilla. Viernes 21 hs. y 22 hs. Centro Cultural Ricardo Rojas, Av. Corrientes 2038. Duración: 30'. Entrada: $40. Hasta el 27 de junio. 

No hay comentarios: